miércoles, 9 de julio de 2008

Pequeño homenaje a Sergio Algora

Columna obra de Sergio Algora en el suplemento Muévete del Heraldo de Aragón. Sergio Algora fue escritor y líder de la banda "La Costa Brava" y fundador del grupo "El niño gusano".

Cuando mi madre fue ingresada en el hospital para ser operada de la columna vertebral mi padre me pasó a su cama. Yo tenía seis años y tenía miedo. Pensaba que la ausencia de mi madre iba a ser definitiva y la casa sin ella se hacía gigantesca y desconocida. Mi padre pasaba toda la mañana en el trabajo y la tarde en el hospital. De su asunto en el quirófano mi madre tendía a pensar lo peor: silla de ruedas, muerte, infierno clásico y otras variantes nada esperanzadoras. Mi padre aguantaba el tirón con ella; y así es el matrimonio, amigos. (Conectar para más información sobre este tema con www.hastaquelamuerteosepare.org) Por la noche padre volvía a casa y tras la cena llegaba el momento más emocionante: a dormir y a escuchar sus cuentos: concretamente dos: “La batalla de la consagración” y “Por qué no hablan los perros”. El primero me parece reiterativo y demasiado sangriento. Pero lo contaré en otra ocasión para que veáis como mi padre unió a Tarantino y a San Marcos sin despeinarse. El segundo cuento y motivo del título de esta columna (mi madre estuvo un mes en el hospital y durante ese tiempo mi padre no me contó otras historias que no fueran esas) se refería a la mudez de los perros. Según él, Jesús reunió a todos los perros del mundo en un valle (¡toma milagro!) y se subió a un pequeño cerro. El motivo del Dog Festival era agradecer tantos años de servicio perruno. En recompensa Jesús les prometió concederles el habla ese mismo día a todos ellos y a las generaciones venideras (pensad que en ese momento se puso del lado de los perros, las perras, y por extensión, de los hijos de perra) y así estaba en actitud milagrera de hacerlo: -yo, Jesús de Nazaret os concedo el don de la palabra, bla, bla, bla, cuando un perro se bufó. Soltó un pedo. Se sintió indispuesto, vamos: hizo una perrería. Y Jesús se enfadó ante tal falta de respeto. También es posible que el Mesías viniera al mundo para salvar a los hombres y no a los perros y de ahí su mosqueo. Pero esta hipótesis es mía. Según mi padre, Jesús decidió no darles el habla hasta que no descubrieran quién había soltado el gas mostaza. Y desde entonces y hasta día de hoy, cuando dos perros se encuentran se huelen el culo.

domingo, 1 de junio de 2008

Lou Reed

Escuchando "A walk on the wild side" tienes ganas de pasarte al lado salvaje de la vida. Esa voz como apagada e intimista te seduce desde ese otro lado para que te unas a ella, y esa es la voz de Lou, que le canta a los travestis, a las groupies y a los junkies. Ahora han pasado los años y el fundador de la Velvet Underground se ha vuelto más comedido; si interpreta "Heroin" o la magnífica "A Perfect Day" se vale de los recuerdos, por lo menos según lo que comentan los que coincidien con él. Pero aun así sigue teniendo ese halo carismático de chulo irredento que fascinaba en los 70. Tendríamos que volver a escucharlo, o escucharlo más. Para mi sigue siendo el mejor; caminó en la insegura cuerda floja hasta llegar a la azotea firme de su vida; por el camino quedan adicciones a todo lo habido y por haber, el cuerpo palillo por el caballo de la muerte y esa chupa de cuero que mantuvo aun cuando el hippismo era moda y los adolescentes vestían de colores como los de ahora visten de b-boys. Es un músico de los que salen una vez cada mil años, pero sobre todo es auténtico. Tuvo la suerte de que Warhol los vio actuando, se maravilló con ellos y les clavó a Nico en el escenario, pero la diva sólo acoplaba su voz en "Femme Fattale"; las canciones de Lou las tenía que cantar él mismo, sino qué significado tenían. Más tarde se bajó del vagón varado que siempre fuera la Velvet, saltando al vacío pero acompañado de otros genios como Bowie o Iggy Pop. En fin, que aun alucino escuchando las canciones del sesentón.

martes, 13 de mayo de 2008

El Gran Lebowski

Y seguimos hablando de cine del bueno. Ahora del título "El Gran Lebowski", de los hermanos Coen, que se estrenó allá por el 1998 pero que aun se la excluye de pasarla en la televisión, aunque mejor, no tiene el crédito suficiente como para codearse con las obras maestras que se emiten en ella. Leslie Nielsen y Jackie Chan acaparan todo el humor en la parrilla, así que sumando a eso que en España cambiamos de programa educativo con cada gobierno, lo más sorprendente sería que la mayoría de los chavales sacaran al menos la ESO. Tampoco voy a defender aquí que viéndola los chavales fueran a ser más inteligentes, ni tampoco que su contenido sea educativo, pero es una obra creativa y original, es decir, que en ella se ve que hay otro tipo de cine que no es de encefalograma plano.
Al tema. Que "El Gran Lebowski" es un caramelo. La trama empieza cuando unos matones confunden a Jeff Lebowski, un individuo de mentalidad hippy que pasa el tiempo sentado en el sofá o jugando a los bolos con otro Lebowski, que es al que realmente buscaban, y tienen la desvergüenza de mearle en su bonita alfombra. ¡Un momento! Teneis que saber que a ese individuo vago que tiene la mala suerte de encontrarse con esos matones sin comerlo ni beberlo le llaman "El Nota", que ese es su nombre y así es como quiere que lo llamen. ¡Así que a mandar! En fin, que "El Nota" ahí va a reclamar al verdadero Lebowski que le compre otra alfombra junto con dos colegas muy especiales y se la trama se lía de manera muy cómica.
Una última cosa, para quien le guste Metallica. Cuando "El Nota" cuenta su pasado, dice que fue chofer de la gira escandinava de Metallica, entre otras cosas. Lo que no dice es que en esa gira murió Cliff Burton (integrante del grupo) cuando el bus en el que viajaban chocó por culpa del chofer.

domingo, 11 de mayo de 2008

Take the money and run

Hoy tengo ganas de hablar de cine, así que creí conveniente hablar de Woody Allen, concretamente de su cinta "Take the money and run", traducida en España como "Coge el dinero y corre". En ella se ve a un joven Woody Allen encarnando a un aspirante a ladrón que siempre fracasa al llevar a cabo sus crímenes en medio de situaciones surrealistas y desternillantes. Para mí, junto a "Misterioso asesinato en Manhattan", ésta es la mejor obra del director neoyorquino.
En el fotograma de arriba se ve al apocado personaje de Allen-Virgin- intentando vanamente tocar el violonchelo en una banda que desfila por las calles. Virgin apresuradamente trata de seguir el ritmo que llevan sus compañeros, pero al final siempre lo acaban abandonando. Quizás sería mejor que buscara para tocar un grupo de cámara.
Ahí va entonces la recomendación, que seguro que hay mucha gente que aun no vio ésta película, y que a mi me sirvió para aficionarme a las obras de éste director.

miércoles, 23 de abril de 2008

Camino a otro lugar

Cuando cumplimos años suele haber gente-familiares, amigos-que se solazan felicitándonos por la efeméride. Te mandan un mensaje, te espetan el típico "felicidades" o se las arreglan para tirarte amargamente de las orejas sonriendo cínicamente. También los hay que-materialistas ellos-te sorprenden con una camiseta, un abalorio o cualquier otro objeto a los que te apuraras conscientemente de mostrar tu interés días atrás. Sin embargo, creo humildemente que así que se cumplen los veinte años el espéctaculo anual se vuelve algo así como anacrónico: parece como que hubiéramos echado el ancla en los felices años de la infancia. Una vez que asomas la cabeza por encima de la veintena sólo te queda seguir lo de "vive de tus padres mientras no puedas vivir de tus hijos" o ponerte las pilas y ganarte un sueldo digno con el sudor de tu frente. Lo primero es bastante difícil, no por los padres, sino por los hijos, que no creo que sean más trabajadores que los de mi generación y estén dispuestos a tirar de sus progenitores. Eso es un sueño. Por lo tanto, lo que nos queda es hincar los codos y sacar algo de provecho de ello, tanto más difícil, o ponernos ya directamente a trabajar en lo que salga. En fin, que tanto rodeo para acabar diciendo que lo de celebrar los cumpleaños es más bien una complacencia de aquellos que te felicitan, que piensan para sí "jódete cabrón que los años pasan para todos".

martes, 15 de abril de 2008

Homenaje a Cataluña(fragmento) de George Orwell

"Los extranjeros que servían en la milicia empleaban su primera semana en amar a los españoles y en exasperarse ante algunas de sus características. En el frente, mi propia exasperación alcanzó algunas veces el nivel de la furia. Los españoles son buenos para muchas cosas, pero no para hacer la guerra. Los extranjeros se sienten consternados por igual ante su ineficacia, sobre todo ante su enloquecedora impuntualidad. La única palabra española que ningún extranjero puede dejar de aprender es mañana. Toda vez que resulta humanamente posible, los asuntos de hoy se postergan para mañana; sobre eso, incluso los españoles hacen bromas. Nada en España, desde una comida hasta una batalla, tiene lugar a la hora señalada.[...] En teoría, admiro a los españoles por no compartir la neurosis del tiempo, típica de los hombres del norte; pero, por desgracia, ocurre que yo mismo la comparto"

"Homenaje a Cataluña" es una obra del larguirucho de seudónimo George Orwell, quien conoció de primera mano las miserias internas de aquellos que lucharon contra las tropas franquistas. Si fuera obligatoria su lectura, nadie en su sano juicio aceptaría que en la televisión, un día sí y otro también, se hablara de la guerra civil como el enfrentamiento entre la democracia y la dictadura. Fue algo más que eso, y creo que los españoles tendríamos que estar orgullosos de haber soñado fervientemente con una sociedad ideal.

domingo, 6 de abril de 2008

La sanidad en Betanzos

En Betanzos tenemos un ambulatorio encomiablemente arquetípico; cualquier hijo de vecino que enferme tiene que soportar la lentitud endémica que impera en la totalidad del sistema sanitario español. Sin embargo, la localidad brigantina gana a la totalidad hispánica en ineptitud y dejadez. Lo que se llama "Urgencias" es en realidad un habitáculo de médicos impostados que se encuentran tres cuartas partes de su horario laboral acodados en el mostrador de información charlando animadamente. Lo sé porque lo sufrí en mis propias carnes hace ahora una semana. Pero eso dista mucho de ser lo más vergonzoso. Cuál fue mi sorpresa cuando una "enfermera" de las que ganaron su empleo en una tómbola me aseguró que tenía una fractura y que tenía que ir al Juan Canalejo para que me escayolaran el miembro afectado. Y yo me pregunto, ¿qué aprende ésta gente en la facultad, si por casualidad han pasado por allí?

jueves, 20 de marzo de 2008

Hombre de fe

André Glucksmann fue uno de los agitadores de un mayo francés de hace 40 años, pero ahora se ocupa de otros menesteres sarkozianos o afirma que en España tendrían que haberse aplazado las elecciones tras el 11-M. La izquierda vira a la derecha, pero no la derecha a la izquierda. Buscando por los "anaqueles" de internet información sobre ese mayo libertario apenas conocido por la juventud de ahora me encuentro con que la pérfida CGT de ese 1968 con George Séguy a la cabeza se arredró de apoyar a los estudiantes calificándolos de jóvenes burgueses que se solazaban lanzando adoquines sabiendo que tendrían tras de sí la seguridad de los francos familiares. La aseveración menoscaba sobremanera el movimiento, pero es indudable que los universitarios de por entonces procedían en su mayoría de la burguesía acomodada: ese es el caso de André Glucksmann. En mi opinión un cambio de chaqueta tan antagónico llena de razón los asertos de la gente de Séguy.

Sin embargo , ¿qué hubiera pasado si hubieran triunfado las barricadas contra los tanques? Es inútil intentar sacar algo en limpio, pero seguro que André Glucksmann se guardaría de renegar de los acontecimientos de mayo; los aires libertarios que ellos insuflaron al movimiento se convertirían en un viento impetuoso imposible de contrarrestar años más tarde.

En cuanto a Sarkozy, parece lógico que ansíe romper abruptamente con el legado indeleble de una generación que con imaginación hizo ver al mundo que los cambios tienen cabida en cualquier lugar si la gente se une para ello. Lástima que los que se vanagloriaban de defender al obrero prefirieran hablar con los gaullistas que con los trabajadores y los estudiantes. Si así fuera otro gallo te cantaría André.

martes, 18 de marzo de 2008

Vincent de Tim Burton

Son ganas de hacer malgastar el tiempo, si lo sé. ¿A quien le va a interesar saber qué hizo un director como Tim Burton hace unos 20 años-creo- si viendo Pesadilla antes de Navidad o la del célebre marginado Manostijeras se está contemplando el cúlmen de su obra? Es como ir de Cien años de soledad a Crónica de una muerte anunciada. Pero como tengo la vaga sensación de que los cuatro gatos-si llegan a tan alta cifra- que me leen les interesan las mismas cosas que a mi, sino parecidas, les dejo aquí éste cortometraje:


http://www.youtube.com/watch?v=nBhrkVuvkCE (Os dejo el link porque ahora no me deja subir el vídeo no se porque, pero ya lo colgaré)



domingo, 16 de marzo de 2008

En el camino (fragmento) de Jack Kerouac

Pero entonces bailaban por las calles como peonzas enloquecidas, y yo vacilaba tras ellos como he estado haciendo toda mi vida, mientras sigo a la gente que me interesa, porque la única gente que me interesa es la que está loca, la gente que está loca por vivir, loca por hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo, la gente que nunca bosteza ni habla de lugares comunes, sino que arde, arde como fabulosos cohetes amarillos explotando igual que arañas entre las estrellas.
.
¿Leísteis algún libro de Jack Kerouac?¿Os gusta?¿Creeis que los escritores de la Generación Beat se atiborraron de sustancias lisérgicas para crear literatura-como fuente de inspiración- o su "literatura" se reduce únicamente a eso: a tomarlas?

miércoles, 12 de marzo de 2008

Viajar

Tengo ganas de viajar, de que broten alas laterales de mi cuerpo para trasladarme en el aire y mirar desdeñoso a los puntos negros que giran en círculo y se desvían solamente unos metros temerosos de no encontrar el camino de vuelta. Tengo ganas de salir de éste paralelepípedo y olvidarme del tiempo pasado durante un tiempo, conocer nuevas vidas que se entrecruzen con la mía para formar un entramado de humanidad confusa que se comunica sin palabras.
Cuando pienso eso, soy un gigante encadenado a la hipocresía de la gente, pero un día las cadenas se partirán y seguiré mi camino.

viernes, 7 de marzo de 2008

Rayuela

Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano por tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja.
Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.

martes, 4 de marzo de 2008

Microrrelatos

El emigrante de Luis Felipe G. Lomelí

-¿Olvida usted algo?
-¡Ojalá!

"...el drama del desencantado que se arrojó a la calle desde el décimo piso, y a medida que caía iba viendo a través de las ventanas la intimidad de sus vecinos, las pequeñas tragedias domésticas, los amores furtivos, los breves instantes de felicidad, cuyas noticias no habían llegado nunca hasta la escalera común, de modo que en el instante de reventarse contra el pavimento de la calle había cambiado por completo su concepción del mundo, y había llegado a la conclusión de que aquella vida que abandonaba para siempre por la puerta falsa valía la pena de ser vivida".

de Gabriel García Márquez

domingo, 2 de marzo de 2008

Sherlock Holmes

Sherlock Holmes ha venido a Betanzos para morir: un sir de mente preclara que habita en miles de libros ha marcado su último destino en el mapa con una cruz roja.

Hace ahora tres semanas Watson había entrado en el 221B de Baker Street para comunicarle a su amigo que se marchaba a una isla samoana con su mujer para hacer más llevadera la molesta herida que arrastraba del Afganistán. Holmes había abrazado de corazón a su único compañero de fatigas, con los ojos vidriosos, conociendo que hasta ahí había llegado: Watson era para él como Julio Cortázar para la Maga.


lunes, 25 de febrero de 2008

Literatos en Betanzos

¿Qué es lo que lleva a alguien a crear un blog de literatura para una "ciudad" que apenas alcanza los 13.000 habitantes? La cuestión, aunque me pareció simple cuando la formulé, abarca ahora diferentes concepciones acerca de la conveniencia de semejante labor.

En primera instancia, es indudable que en Betanzos hay lectores, menos que más, pero "habelos hailos". Sólo hace falta ir a la Biblioteca Municipal para comprobar que cada semana aparecen en los estantes diferentes intersticios delatores de la voracidad lectora de los brigantinos, que introducen subrepticiamente los volúmenes en sus bolsillos o en su defecto en el vientre de sus chaquetas, si la obra tiene un tamaño considerable. A esa gentualla la llamo "Literatos en Betanzos", que no es cuestión de excluir en este aspecto a la gente de otros lugares.

Los "Literatos en Betanzos" son gente abigarrada que jamás tendrán una definición grupal infalible, ni maldita falta que hace, pero que bien podrían remedar a los bohemios finiseculares que formaban en Madrid los cenáculos más conocidos, y así como ellos conversaban animadamente al trasluz de los líquidos-ol de las tabernas más sórdidas de la capital, nosotros podríamos divagar al amparo de la claridad mecanizada de la caja salvafronteras.